La Luz del Silencio
4 participantes
La Luz del Silencio
¡Hola!
Bueno pues me animo a colgar aquí un pequeño relato que escribí hace tiempo llamado La Luz del Silencio.
A ver que os parece =D
Me temblaban las manos cuando cogí el micrófono, era la primera vez que daba un discurso importante. Un centenar de personas me miraban, expectantes, y yo no sabía que decir. De todas las situaciones que he vivido esta fue la peor. Una lágrima corrió por mi mejilla cuando bajé del escenario. Mis palabras habían sonado vacías, sin vida, y aunque los espectadores aplaudían, lo hacían sin ganas, con la desilusión pintada en sus miradas. Mientras me alejaba en silencio todavía se podía escuchar el etéreo sonido de los aplausos en el salón de actos, que se iba desvaneciendo poco a poco conforme me alejaba, hasta que finalmente se extinguió. Fue entonces cuando lo vi por primera vez. Un anciano de cabellos blancos me miraba a través de sus lentes redondas desde el final del pasillo. Se apoyaba en un bastón y su rostro plagado de arrugas parecía sonreírme. Le devolví la sonrisa, olvidando por un momento mi penosa actuación. Entonces el anciano me invitó con un gesto a que le siguiera y torció a la derecha, desapareciendo por el corredor. Intrigada le seguí a través de un montón de salones y pasillos de una elegancia exquisita. Hasta que por fin llegamos a una pequeña habitación donde el anciano se detuvo. Observé a mi alrededor, intentando averiguar qué era lo que quería mostrarme. La habitación era rectangular, sin ventanas. Las paredes estaban decoradas con hermosos tapices que representaban diferentes escenas medievales. En un extremo había un sofá y una pequeña mesa en la que descansaba un jarrón de flores. Iba a preguntar algo cuando el anciano me indicó silencio posando un dedo sobre su boca. Entonces hizo algo que me sorprendió. Con la mano que no sujetaba el bastón levantó uno de los tapices y se introdujo por un pasillo que había al otro lado. Dudé unos instantes, pero la curiosidad me carcomía por dentro, así que finalmente me introduje por la pequeña obertura siguiendo al misterioso anciano. No dejó de sorprenderme el interior, otro pequeño túnel que desembocaba en una sala circular en cuyo interior no había más que una mesa y una silla. Sobre la mesa había un libro, un tomo bastante gordo, encuadernado en tapa dura de color negro. Avancé unos pasos y pude leer las letras que daban título al libro, grabadas en plateado:
“LA LUZ DEL SILENCIO”
De nuevo quise preguntar algo, pero al girar la cabeza descubrí que estaba sola, me asomé al corredor, también estaba desierto. Ignorando el hecho de que el hombre hubiera desaparecido, me senté en la silla y abrí el libro. Lentamente, dejé que sus palabras inundaran mi mente y llenaran de nuevo mi espíritu, que desde hacía varios años parecía vacío, triste. Me sumergí en la historia, sus misterios me rodearon, y me vi reflejada en cada uno de los personajes que aparecían. No sé cuanto tiempo había pasado –quizá horas- cuando acabé de leer. La historia me había conmovido, me había llenado de una fuerza interior inexplicable, que no llegaba a comprender. Salí de la habitación, dejando un mundo a mis espaldas, un mundo contenido en un libro. Inexplicablemente conseguí llegar al corredor principal.
Fue entonces cuando oí algo que me llamó la atención; desde el salón de actos se oían aplausos. No creía posible que los espectadores siguieran ahí, aplaudiendo, pues estaba completamente segura de que con mi intervención se terminaba la actuación. Con curiosidad me asomé por una puerta lateral y fue una sensación un tanto extraña, como volver al pasado. Allí, en el estrado, estaba yo. Igual pero diferente, pronunciando un discurso que nunca hubiera considerado como mío. Las palabras que emanaban de la que parecía se mi boca estaban cargadas de una vitalidad y un carisma que no me pertenecían. De algún modo aquel libro no solo me había cambiado a mí, si no que había cambiado mi vida hasta tal punto que ni si quiera mi pasado era el mismo. Entonces comprendí que a partir de ese momento nada volvería a ser igual.
Illien
Bueno pues me animo a colgar aquí un pequeño relato que escribí hace tiempo llamado La Luz del Silencio.
A ver que os parece =D
Me temblaban las manos cuando cogí el micrófono, era la primera vez que daba un discurso importante. Un centenar de personas me miraban, expectantes, y yo no sabía que decir. De todas las situaciones que he vivido esta fue la peor. Una lágrima corrió por mi mejilla cuando bajé del escenario. Mis palabras habían sonado vacías, sin vida, y aunque los espectadores aplaudían, lo hacían sin ganas, con la desilusión pintada en sus miradas. Mientras me alejaba en silencio todavía se podía escuchar el etéreo sonido de los aplausos en el salón de actos, que se iba desvaneciendo poco a poco conforme me alejaba, hasta que finalmente se extinguió. Fue entonces cuando lo vi por primera vez. Un anciano de cabellos blancos me miraba a través de sus lentes redondas desde el final del pasillo. Se apoyaba en un bastón y su rostro plagado de arrugas parecía sonreírme. Le devolví la sonrisa, olvidando por un momento mi penosa actuación. Entonces el anciano me invitó con un gesto a que le siguiera y torció a la derecha, desapareciendo por el corredor. Intrigada le seguí a través de un montón de salones y pasillos de una elegancia exquisita. Hasta que por fin llegamos a una pequeña habitación donde el anciano se detuvo. Observé a mi alrededor, intentando averiguar qué era lo que quería mostrarme. La habitación era rectangular, sin ventanas. Las paredes estaban decoradas con hermosos tapices que representaban diferentes escenas medievales. En un extremo había un sofá y una pequeña mesa en la que descansaba un jarrón de flores. Iba a preguntar algo cuando el anciano me indicó silencio posando un dedo sobre su boca. Entonces hizo algo que me sorprendió. Con la mano que no sujetaba el bastón levantó uno de los tapices y se introdujo por un pasillo que había al otro lado. Dudé unos instantes, pero la curiosidad me carcomía por dentro, así que finalmente me introduje por la pequeña obertura siguiendo al misterioso anciano. No dejó de sorprenderme el interior, otro pequeño túnel que desembocaba en una sala circular en cuyo interior no había más que una mesa y una silla. Sobre la mesa había un libro, un tomo bastante gordo, encuadernado en tapa dura de color negro. Avancé unos pasos y pude leer las letras que daban título al libro, grabadas en plateado:
“LA LUZ DEL SILENCIO”
De nuevo quise preguntar algo, pero al girar la cabeza descubrí que estaba sola, me asomé al corredor, también estaba desierto. Ignorando el hecho de que el hombre hubiera desaparecido, me senté en la silla y abrí el libro. Lentamente, dejé que sus palabras inundaran mi mente y llenaran de nuevo mi espíritu, que desde hacía varios años parecía vacío, triste. Me sumergí en la historia, sus misterios me rodearon, y me vi reflejada en cada uno de los personajes que aparecían. No sé cuanto tiempo había pasado –quizá horas- cuando acabé de leer. La historia me había conmovido, me había llenado de una fuerza interior inexplicable, que no llegaba a comprender. Salí de la habitación, dejando un mundo a mis espaldas, un mundo contenido en un libro. Inexplicablemente conseguí llegar al corredor principal.
Fue entonces cuando oí algo que me llamó la atención; desde el salón de actos se oían aplausos. No creía posible que los espectadores siguieran ahí, aplaudiendo, pues estaba completamente segura de que con mi intervención se terminaba la actuación. Con curiosidad me asomé por una puerta lateral y fue una sensación un tanto extraña, como volver al pasado. Allí, en el estrado, estaba yo. Igual pero diferente, pronunciando un discurso que nunca hubiera considerado como mío. Las palabras que emanaban de la que parecía se mi boca estaban cargadas de una vitalidad y un carisma que no me pertenecían. De algún modo aquel libro no solo me había cambiado a mí, si no que había cambiado mi vida hasta tal punto que ni si quiera mi pasado era el mismo. Entonces comprendí que a partir de ese momento nada volvería a ser igual.
Illien
Illien- Visitante conocido
- Mensajes : 50
Fecha de inscripción : 30/01/2010
Re: La Luz del Silencio
Me ha encantadoo!!!!!
En serio, está genial!! Gracias por compartirlo con nosotross!!
A ver si escribes algún otro relatillo!!
En serio, está genial!! Gracias por compartirlo con nosotross!!
A ver si escribes algún otro relatillo!!
Re: La Luz del Silencio
Me alegro de que te haya gustado ^^
No creo que escriba otro porque estoy falta de imaginación ultimamente, pero a lo mejor cuelgo algún otro que ya tengo escrito.
No creo que escriba otro porque estoy falta de imaginación ultimamente, pero a lo mejor cuelgo algún otro que ya tengo escrito.
Illien- Visitante conocido
- Mensajes : 50
Fecha de inscripción : 30/01/2010
Re: La Luz del Silencio
oh que bonito, esta muy bien escrito
Icy Stare- Tren de vapor
- Mensajes : 293
Fecha de inscripción : 26/03/2010
Localización : Reclutando foristas
Re: La Luz del Silencio
Me ha gustado mucho el relato, sobre todo el final Está muy bien escrito ^^
Anumy- Visitante conocido
- Mensajes : 56
Fecha de inscripción : 19/05/2010
Localización : soñando despierta *______________*
Re: La Luz del Silencio
gracias chicas!!
Illien- Visitante conocido
- Mensajes : 50
Fecha de inscripción : 30/01/2010
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